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A HERPERVIROSIS CANINA
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Si vosotros sois criadores o si os planteais hacer criar a vuestra perra este artículo os puede interesar. La herpervirosis es una enfermedad canina, mundialment extendida. Es el origen de diferentes manifestaciones, pero es sobre todo perjudicial para los cachorros Imposible de curar, pero, una nueva vacuna permetirá pronto prevenirla.

UNA REPARTICIÓN MUNDIAL

La herpervirosis fue identificada el 1965 como responsable de la mortalidad de cachorros de corta edad (menos de dos semanas) en los EEUU. Despuès, ha sido diagnosticada en numerosos paises: Australia, Bélgica, Francia, Gran Bretaña, Holanda, Irlanda, Italia, Nueva Zelanda y Suiza.

La herpervirosis canina es esencialmente una patología de grupo.

Los estudios recientes han revelado que ciertas colectividades alojaban hasta un 90% de animales portadores del virus. Por otra parte, se ha podido comprobar que la mitad (48%) de criaderos donde se han podido observar dificultades en la reproducción, los animales han estado en contacto con el virus.

No se puede concluir que el herpes virus es sólo el responsable, pero ha sido reconocido como un agente que favorece la aparición de otras infecciones. Es pues, un real hándicap para los criadores.

Las fuentes de contaminación son múltiples, unos animales que vivan en un ambiente familiar pueden ser igualmente portadores de este virus. Pueden no tener ningun síntoma, pero el virus reaparece cuando la perra entra en celo.


¿EL MODO DE CONTAMINACIÓN?

En el nacimiento, las secreciones vaginales de la perra contaminan a los cachorros por vía oral o nasal. Es la fuente de contaminación principal para los cachorros.

El macho y la hembra pueden contaminarse el uno al otro en el aclopamiento. El esperma no parece, hoy en día, ser contaminante.

El virus, puede igualmente llegar a los cachorros atravesando la placenta durante la gestación.

¿CUALES SON LOS PRINCIPALES SÍNTOMAS?

La contaminación de los cachorros antes de dos semanas de edad conducen a menudo a una forma aguda: los cachorros mueren en 24 o 48 horas.

Cuando un animal de más de dos semanas sale de la infección, puede haber eliminación del virus o infección crónica. En este caso el animal alberga y excreta el virus durante tota su vida. Entonces puede presentar los síntomas cuando tiene estrès, en ocasión de ciertos tratamientos, de enfermedad o en el momento de los celos en la perra.

La infección de una hembra en gestación puede afectar la placenta y los fetos: los cachorros pueden morir aantes o poco después del nacimiento. Si sobreviven, se convierten en portadores crónicos del virus.


UNA PERSISTENCIA DE POR VIDA PARA EL CRIADERO

La presencia de este virus en un criadero lleva verdaderos problemas recurrentes. Abortamientos, mortalidad de cachorros, bajada de la fecundidad de ciertas hembras, tienen una incidencia económica no negligible para el criador.


¿CÓMO SABERLO?

La sospecha de la infección por herpesvirus puede ser hecha a partir de los síntomas o de las dificultades repetitivas de reproducción en un criadero. Está claro, que de entrada, no se pueden descartar otras causas infecciosas. El diagnóstico se hace en el laboratorio por diferentes métodos.


¿CÓMO PROTEGERSE?

No existe ningun tratamiento eficaz contra la herpevirosis.

La única medida preventiva a realizar es recalentar a los cachorros para mantener su temperatura corporal alrededor de 38,5ºC.

Los controles serológicos de los reproductores con el objectivo de descartar a los animales positivos, parece ser el único medio de erradicar el virus de un criadero.

El recurso a la inseminación artificial con semen fresco o congelado permite evitar los contactos entre reproductores, pero no evitará la contaminación de la camada si la madre al
aloja ya el virus.


EURICANHERPES 205: LA PREVENCIÓN INDIVIDUAL ES POSIBLE

La mejor prevención contra la forma aguda neonatal es la vacunación de la madre.

Dos inyecciones son necesarias: la 1ª ha de ser puesta en el momento del acoplamiento o de la inseminación artificial. La 2ª se pone entre el 45 y el 48 día de gestación.

Esta vacunación es tolerada perfectamente y no presenta ningún riesgo ni para la madre ni para los cachorros.

El principio de esta vacunación es original porque se trata de proteger a los cadells vacunando a la madre. Efectivamente, las dos inyecciones provocan en la madre una producción de anticuerpos contra el virus que se encuentran en mucha cantidad en el calostro (la leche de los primeros días del amamentamiento ). Los cachorros se protegen así desde que empiezan a mamar. Los anticuerpos de la madre aseguran la protección de los cachorros contra las formas mortales de la herpesvirosis.

Si vosotros proyectais hacer reproducir a vuestra perra, y habeis tenido problemas en una gestación precedente, pensad pedir consejo a vuestro veterinario.

 
JOAN FERRER i SIRVENT
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